Coca Cola arranca hoy su campaña de Navidad #hazfelizaalguien, con la intención de que todos podamos compartir aquellos pequeños detalles que hacen felices a las personas que queremos, a través de las redes sociales.
La marca de la felicidad y de la chispa de la vida apela este año más que nunca a este sentimiento, ya que la multinacional estadounidense no ha vivido momentos fáciles en nuestro país. El cierre de algunas de sus plantas, los ERES puestos en marcha, las protestas, y las decisiones judiciales anulando los despidos improcedentes, ha puesto a Coca Cola en una situación complicada. La respuesta en cuanto a comunicación y marketing fue inmediata. En los últimos meses se ha producido un amplio despliegue de anuncios publicitarios en el que se difunde la labor social que la marca realiza en nuestro país y su compromiso con todos, incluso a los que «no les gusta la bebida», como el abuelo que, ante el asombro de su camarero habitual, pide una Coca Cola, porque su nieto, gracias a las acciones de la marca, puede ensayar con su grupo de música y cumplir su sueño de convertirse en profesional.
En Navidad el espíritu de «una Coca Cola, una sonrisa» vuelve a convertirse en protagonista, aunque en este caso importan las sonrisas de los demás, y a buen seguro que competirá con otras grandes marcas para convertirse en el último spot del 2014 o el primero del 2015.