Que Noruega, es el país más feliz del mundo ya lo sabíamos: su salario mínimo es de 3.000 €, tienen trabajo, educación y sanidad gratuita y una cultura democrática y de respeto a los demás totalmente consolidada.
Pero para los más incrédulos, ahí va el Informe Mundial de Felicidad que se ha publicado hoy coincidiendo con el Día Internacional de la Felicidad. Este estudio, ha sido elaborado por la Red de Soluciones de Desarrollo Sostenible, iniciativa puesta en marcha por Naciones Unidas en 2012, y la Universidad de Brithish Columbia. Para su elaboración se tienen en cuenta seis factores: Producto Interno Bruto per cápita, expectativa de vida saludable, libertad, generosidad, respaldo social y ausencia de corrupción en el gobierno o las empresas.
Noruega encabeza este año el ranking seguido de Dinamarca, Islandia, Suiza, Finlandia, Holanda, Canadá, Nueva Zelanda, Australia y Suecia completan los 10 primeros países de la lista, según ha argumentado Jeffrey Sachs, director de SDSN y asesor especial de la Secretaría General de Naciones Unidas: “Los países felices son los que tienen un equilibrio saludable de prosperidad, medida de manera convencional, y capital social, o sea un alto grado de confianza en la sociedad, baja desigualdad y confianza en el gobierno”
A la medición de los parámetros, en el caso concreto de Noruega se une su propia filosofía de vida, lo que ellos denominan el hygge, un concepto sobre el que se ha escrito mucho en los últimos meses, y que no resulta tan fácil de replicar.
En la cola de la lista, los países del África subsahariana como Sudán del Sur, Liberia, Guinea, Togo, Ruanda, Tanzania, Burundi y la República Centroafricana, junto con Siria y Yemen. Estos son los menos felices de los 155 países evaluados en este quinto Informe de Naciones Unidas. Destacan las posiciones de algunos países de América Latina como Costa Rica que ocupa el décimosegundo lugar; seguido de Chile (20), Brasil (22), Argentina (24), México (25), Uruguay (28), Guatemala (29) y Panamá (30).
Si miramos hacia Europa, Alemania ocupa el puesto 16, Reino Unido el puesto 19, Francia el 31 y España en el puesto 34. Entre las conclusiones de este informe, un dato preocupante, Estados Unidos ha descendido una posición y se sitúa en el puesto número 14. ¿Los motivos? Sachs ha sido claro al afirmar que «la desigualdad, la desconfianza, la corrupción y las medidas económicas que Donald Trump está intentando implementar empeorarán aún más su situación».