Social Talent Day 2016, un evento al que hemos asistido esta mañana, organizado por Experis consultora especializada en soluciones de atracción, identificación evaluación, selección, desarrollo y gestión del talento profesional perteneciente a la multinacional ManpowerGroup.
Allí nos hemos reunido más de 200 profesionales procedentes de los departamentos de Recursos Humanos y Marketing y Comunicación de grandes compañías. Bajo el claim ¿Te he dicho ya que hoy estás irrresistible?, Experis ha planteado una jornada centrada en las distintas formas que las empresas pueden utilizar para seducir, desarrollar y retener el talento en sus compañías. Porque «el talento escasea, según ha afirmado Pablo Urquijo, director General de Experis, y toda imaginación es poca para convertir nuestras empresas en aquel lugar donde todos deseen trabajar y desarrollar sus proyectos de vida profesional y personal».
La jornada prometía y lo cierto es que no ha defraudado, con el panel de ponentes, moderados por Carlos de Vega, subdirector del diario El País: Sarah Harmon, Head of Linkedin Talent Solutions Iberia, Diego Charola, HR General Manager de Grupo Cortefiel, Jorge Catalá, Retail Industry Head Google España, Juan Luis Polo, Founding Partner & Corporate General Manager de Territorio Creativo y Adolfo Corujo, Socio y Director General Corporativo de Talento, Organización e Innovación de Llorente y Cuenca.
De todo lo escuchado, extraigo estas conclusiones que comparto con todos vosotros:
- El Talento es escaso y así continuará de no producirse una alineación de los planes educativos actuales con las necesidades que el ámbito empresarial precisa, a partir de la incorporación de las nuevas tecnologías de la información.
- Recursos Humanos y Marketing y Comunicación han de hablar el mismo idioma, como única forma de seducción y retención del talento.
- Las compañías se las ven y se las desean para seducir el talento, pero no deben olvidar el talento del que ya disponen. Y por ello han de fomentar el desarrollo profesional y personal de sus equipos, ser absolutamente transparentes y hacer lo que prometen para retenerlo, porque ya no nos encontramos en la Era de la Estética, sino en la Era de la Ética.
- Las mejores marcas son las que ponen en práctica el employer branding. El trabajador como el mejor embajador de la compañía.
- El talento se fomenta con una visión alineada con lo que la compañía lleva a cabo, hace lo que promete; potenciando la autonomía de los equipos; y favoreciendo un desarrollo continuo personal y profesional de las personas.
- No trabajamos para nuestro jefe, ni para el CEO, ni para los accionistas de nuestra compañía, trabajamos para nuestros clientes.
- Las compañías son como un matrimonio y pasan por el mismo proceso: enamorar, convivir y, en el caso de ruptura, añorar.
- No hay transformación digital sin un cambio de cultura, y este cambio ha de partir, sin ninguna duda, de los líderes de las compañías.